El mundo de la tecnología
ofrece un gran número de comodidades para todo el mundo, especialmente con los
sistemas de seguridad como las HID
tarjetas de proximidad, las más usadas
actualmente en cuanto a seguridad de accesos y salidas de diferentes
instituciones, empresas, etc., así como de identificación entre otras
características.
Además de la tecnología
HID podemos encontrarnos otra clase tecnología
de proximidad muy actual aunque su origen se remonta al año 2003, la tecnología
NFC. Actualmente
pretenden ser usadas para pagar aunque en este aspecto todavía están en una etapa
incipiente y deben perfeccionar muchas cosas aún.
También son muy utilizados
en telefonía móvil para compartir fotografías, vídeos, música o cualquier otra
clase de archivo. Sony ha ido un poco más allá y permite el uso de la
televisión como si fuese la pantalla de nuestro smartphone gracias a mandos
dotados de esta tecnología.
A pesar de esto, puede que
la tecnología NFC no sea el futuro, al menos el futuro más próximo dado que aún
está en una fase muy temprana y tiene muchas cosas en las que mejorar. Por
ejemplo, aunque dos móviles dotados de tecnología NFC se pongan uno frente a
otro o de diferentes posiciones, en ocasiones debe intentarse muchas veces
hasta que se encuentra la posición más adecuada para conseguir la conexión,
algo que no supone ningún ahorro de tiempo, sobre todo si se quiere usar esa
tecnología como un pago o como transferencia inmediata de datos.
A las HID y al NFC se les
suman las tarjetas biométricas, capaces de reconocer la identidad de la persona
que las lleva. Todavía no están demasiado extendidas y aún se debe trabajar
mucho en este campo. Debido a que la biometría cuenta ya con dispositivos de
acceso como reconocimiento de iris, voz o huellas dactilares, las tarjetas
biométricas podrían quedar relegadas a usos muy limitados.
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