Poco a poco se está
acercando el buen tiempo y dentro de unos meses, las personas más afortunadas
tendrán que tener preparada la piscina para recibir al verano de la forma más
fresca posible, pudiendo darnos un buen chapuzón. Para ello hay que tener la piscina
bien limpia y revisar todos sus sistemas como por ejemplo el filtro
de agua con el que controlar todas
las impurezas.
¿Cómo funciona el
filtro de agua de una piscina?
Toda piscina que se precie
debe contar con un sistema de filtración con el que poder tener el agua
completamente limpia, libre de algas y también de muchas clases de bacterias,
siendo la bomba y el filtro de agua los elementos más importantes para que esto
sea así.
Mediante un motor eléctrico,
la bomba va aspirando el agua de la piscina hacia el sumidero, la cual es
impulsada a una cámara de vacío que hace la función de carcasa de la propia
bomba. Después el agua pasa a un tanque que cuenta con un material con
propiedades filtrantes como por ejemplo arena de sílex o incluso carbón activo,
con lo que se consigue una efectiva filtración del agua.
Un alto porcentaje de las
impurezas que se encuentran en el agua acaban siendo retenidas en el lecho
filtrante. Por otro lado, hay que destacar que el difusor, que está instalado
en el interior de ese tanque permite la eliminación de las burbujas de aire.
Posteriormente se devuelve
el agua limpia de nuevo a la piscina, con lo que se habrá completado un ciclo
completo, algo que puede tener una duración más o menos determinada, siempre
dependiendo del tamaño de la piscina y por consiguiente del agua a filtrar, de
la potencia con la que cuenta la bomba y también por la capacidad del filtro a
usar.
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