Desde la llegada de
Internet el sector empresarial ha sufrido muchos cambios, desde las pequeñas
pymes hasta las firmas dedicadas por completo a las TiC. Hoy en día es muy
extraño, o prácticamente imposible encontrar una empresa que no tenga relación
directa o indirecta con Internet y/o software por ejemplo.
Dentro de la gran cantidad
de nuevas cosas que han ido apareciendo, ya no solo gracias a la red de redes
sino gracias a los avances en informática, encontramos infinidad de acrónimos
relacionados con el software y las empresas, PMS o Software
de Gestión de Proyectos, PPM o Gestión de
Portfolio Proyectos o SaaS, Software como Servicio.
Vamos a quedarnos con este
último término, el cual está jugando un gran papel hoy en día en el mercado. Se
trata de una aplicación ofrecida por un desarrollador mediante la red para que
pueda ser utilizada por uno o más clientes y manteniendo tanto la privacidad de
sus datos como la personalización de la aplicación.
El usuario paga por el uso
de toda la infraestructura necesaria para que la aplicación funcione
correctamente, reciba updates o se corrijan bugs entre muchos otros aspectos,
lo que lo hace muy interesante a nivel empresarial, pero…
¿Qué beneficios aporta exactamente a una empresa?
Una de las más importantes
es una menor inversión en cuanto a software dado que se ajusta lo máximo el
presupuesto y tampoco tenemos que pagar mes a mes las licencias que tendríamos
que pagar si no contásemos con esta alternativa.
Además de ello nos
proporciona seguridad, algo muy importante actualmente a todos los niveles,
especialmente cuando se trabaja con grandes cantidades de datos de personas,
bases de datos, etc. Tampoco hay que preocuparse ni por mantenimiento ni
actualizaciones y nos permite una gran movilidad dado que al ser software
online podemos utilizarlo en cualquier lugar donde tengamos acceso a Internet.
Comentarios
Publicar un comentario