¿Por qué es necesario innovar?

Lo hemos visto y oído miles de veces: innovar, innovación…, son palabras muy de moda que forman parte de muchos discursos, tanto políticos como empresariales. La innovación supone un salto cualitativo respecto a hace unos cuantos años, la búsqueda de nuevos proyectos y modelos de negocio cuando ya están obsoletos sobre los que se estaba trabajando. La gestión de farmacias actual también está viviendo este momento dado que cada vez son más las que están apostando por la innovación, dejando patente que esto no es algo únicamente de las grandes empresas sino de todas.

Cuando hablamos de innovación podemos referirnos a la aplicación de nuevas técnicas de marketing, tecnología, ingeniería social, estrategias económicas o incluso fiscales, buscando el objetivo de conseguir mejoras en todos los aspectos que forman parte del día a día de una farmacia.

Para que exista la innovación debe haber voluntad y creatividad, siempre buscando nuevas fórmulas que repercutan en el buen desarrollo empresarial farmacéutico y productos o servicios que resulten un valor añadido de cara a los clientes. Además, gracias a la constante búsqueda e implantación de modelos novedosos, se puede aumentar la productividad, obteniendo más eficacia y eficiencia en los diferentes procesos de la farmacia.

Nadie duda de que la fórmula que se ha usado durante años en la farmacia ha funcionado durante tiempo, pero las cosas han ido cambiando poco a poco, especialmente desde la llegada de Internet y la globalización. Esto ha hecho que los modelos tradicionales estén siendo reemplazados por otros más efectivos gracias a la innovación y al conjunto de diferentes técnicas aplicadas que repercuten positivamente en las empresas.

Si nos planteamos la pregunta de si la innovación es necesaria, la respuesta es totalmente afirmativa, no solo mirándolo desde dentro de la farmacia, con mejores y más rápidos sistemas de almacenamiento, dispensación, cobro, etc., sino también mirándolo desde el punto de vista de los clientes, quienes pueden recibir una atención personalizada, tardar menos tiempo en hacer una compra, contar con más variedad de productos, etc.